Una buena salsa de tomate es un básico en la nevera de mi casa desde que Gabi sufre de las intolerancias ya que todas las salas que se comercializan y ya están cocinadas llevan demasiado azúcar. Así que una vez a la semana me pongo manos a la obra y hago yo misma la salsa de tomate que me sirve tanto para pastas como para añadir a otros platos como guisos.
Puedes usar tomate triturado envasado o hacerla con tomates de la huerta si están en temporada. Yo de momento agilizo el trabajo con un tomate triturado ya envasado y el resultado es muy bueno.
En slow cooker difícilmente se puede hacer tomate frito, no te voy a engañar, porque no se alcanza la temperatura necesaria para freír el tomate; es una salsa de tomate pura y dura pero si quieres para la receta que necesites hacer darle unos golpes de sartén y la espesarás a tu gusto.
Receta Sansa de Tomate
Preparación 10 minutos
Cocción 4 horas en Alta
INGREDIENTES
2 botes de 500 ml de tomate triturado o 1 kilo de tomate natural pelado y triturado.
Hierbas aromáticas (Laurel, tomillo)
AOVE
Pimienta negra en grano
Sal
PREPARACION
Calienta la olla de cocción lenta en ALTA y vierte aceite de oliva hasta que cubra el fondo de la olla.
Coloca el tomate triturado en el recipiente de la crock pot.
Si utilizas tomate natural, pélalo, elimina el pedúnculo y tritúralo.
Incorpora unos 6 granos de pimienta negra y las hierbas aromáticas y añade sal al gusto. (yo no le pongo azúcar)
Tapa el slow cooker y cocina durante 4 horas en ALTA.
Una vez terminada la cocción, prueba y rectifica el punto de sal si fuera necesario. Si la salsa resulta algo ácida, puedes poner un poco de bicarbonato.
Et voilà!!! Ya tienes un básico en tu nevera rico y sano.
Mamadedos
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